En otro hadith de Anas el profeta nos dijo:

Allah ha establecido dos tipos de derechos, los derechos de Allah y los derechos de los siervos. El creyente está en la obligación de hacer cumplir con los derechos de ambas partes. La fe no es solo una cuestión de relación personal entre Allah y su siervo, ciertamente esto es solo una parte de la fe. También consiste en respetar los derechos de nuestros hermanos y hacerlos cumplir. Quien no ama para su hermano, lo que ama para sí mismo, tiene una fe defectuosa. No podemos pedir misericordia de Allah si no damos misericordia ni deseamos misericordia para nuestros hermanos.

Algunos sabios opinan que este hadith también se refiere a nuestros hermanos en humanidad, no solo nuestros hermanos en la fe. Algunos musulmanes creen que tienen obligaciones solo con otros hermanos en la fe, y creen que pueden engañar a los no-musulmanes. ¡Esto es falso! El verdadero creyente respeta los derechos de la humanidad, así como desea el bien para su hermano en la fe, también desea el bien para su hermano en humanidad, siendo el bien primordial la guía al Islam.

Los sentimientos como la envidia, la codicia, la avaricia, la arrogancia, son enfermedades del alma que no permiten al creyente desear para su hermano aquello que desea para el mismo, estas enfermedades deben ser tratadas, de lo contrario nuestra fe permanecerá defectuosa, y puede llegar a desvanecerse.

El hadith de Al Abbas:

Estar complacido con Allah implica estar satisfecho con el Señorío de Allah, el Qadar, y El Juicio de Allah sobre  nuestros asuntos. Estar complacido con el Islam, implica someterse a Allah por medio de su religión, cumplir con las obligaciones como musulmán y estar en estado de gratitud con Allah por el regalo de la religión y la guía a seguirla. Estar complacido con Muhammad es reconocerlo como el mejor ser humano que ha existido en la historia, siendo el pináculo de todas las bondades y cualidades, seguir sus enseñanzas,  estar complacido con su misión como profeta, amarlo sobre todo los humanos y obedecer sus órdenes.

Allah nos dice en el Quran:

En otro verso, Allah nos dice:

¿Cómo puede el creyente no estar complacido con un mensajero tan misericordioso que sufre por su gente?

¿Cómo puede el ser humano, no seguirlo y amarlo sobre todos los demás cuando él amó a sus hermanos en la fe más a que a nada en este mundo?

Amar al profeta Muhammad es amar a Allah, es una forma de probar nuestro verdadero amor por El Creador. Allah dice en el Quran:

Quien dude de la veracidad de la Sunnah, y crea que solo debe seguir  el Quran, debe leer este verso, La Sunnah es la revelación de Allah enseñada a la humanidad por medio del Profeta. El profeta Muhammad nunca habló bajo la influencia de sus deseos, cuando no sabía la respuesta a algo esperaba en silencio la revelación de Allah.

Quien ama a Allah y dice creer en Él, debe amar a quien Él ama, y obedecer a quien Él ordena. Lo que detuvo a muchas personas de la tribu de Quraish a someterse a la verdad fue la desaprobación del profeta como Mensajero de Allah. Pensaban que Allah debió haber escogido a uno de los líderes de Quraish. ¿Quiénes somos nosotros para juzgar la decisión de Allah? Debemos saber, que solo Él exalta y humilla, y a quien Él exalta, es debido a sus hermosas cualidades.

El creyente no debe menospreciar a nadie, pues nunca sabemos lo que hay en el corazón de los demás, puede ser que aquel al que menospreciemos, sea más amado para Allah que nosotros. El creyente es lo suficientemente humilde para reconocer que el juicio solo pertenece a Allah.

Basado en el libro ‘el árbol de la fe’ de Abdul Rahman As Sadi.