Suyúd
Antes de hacer el Suyud decimos Allahu Akbar, está permitido levantar las manos al nivel de los oídos. Según ibn Omar, El profeta lo hizo una o dos veces para mostrar que es permitido.
Cuando bajamos al Suyud, debemos poner siete partes de nuestro cuerpo contra el suelo:
Frente y nariz, manos, rodillas y dedos de los pies
Al estar en Suyud decimos:
Subhana rabiyyal ‘alaa Trascendente es Mi Señor El Altísimo
Después de repetir esta suplica tres veces podemos hacer todas las duaas que deseemos y permanecer en esta posición todo el tiempo deseado, es la posición en la que el siervo está más cerca de su Señor. Declaramos cuan Altísimo es el Señor de los mundos mientras el miembro mas noble de nuestro cuerpo, el rostro, está en el suelo suplicándole con devoción.
Levantarse del Suyud
Al levantarnos del primer Suyud decimos takbeer Allahu Akbar
Sentarse entre ambas postraciones (yulus)
Entre ambas postraciones decimos:
Rabbigh firlee Oh Mi Señor Perdóname
Luego realizamos el segundo suyud repitiendo la misma suplica del primero Subhana Rabiyy Al Adheem, mínimo 3 veces.
Mantener la calma
El Salah es un momento para descansar nuestra mente de las cosas que nos aturden en el Dunia, meditar y relajarnos, por eso debemos mantener la calma cuando realizamos el Salah. Realizar cada parte de la oración con consciencia.
Muwaalaat (seguir la secuencia)
Después de hacer los dos suyud nos levantamos diciendo Allahu akbar y levantando las manos al nivel de los oídos y continuamos con todos los pilares anteriores excepto la duaa de inicio y el istiadh.